La tarea de la filosofía es darle al hombre una visión integrada de la vida, una visión que sirve como base y referencia para todas sus acciones, físicas o mentales, psicológicas o existenciales. Esta visión le dice la naturaleza del universo con el que tiene que lidiar (metafísica) ; los medios con los que lidiar con él, es decir, los medios de adquirir conocimiento (epistemología); los criterios por los cuales ha de elegir sus objetivos y sus valores, bien sea en cuanto a su propia vida y carácter (ética) o en cuanto a la sociedad (política) ; y la forma de concretar esta visión (estética), el estudio del arte y su papel en la vida humana.
Los hombres que no están interesados en filosofía son los que más urgentemente la necesitan: son ellos quienes están más desesperadamente en su poder, absorbiendo sus principios de la atmósfera cultural que les rodea – de escuelas, universidades, libros, revistas, periódicos, películas, televisión, etc. ¿Quién determina el tono de una cultura? Un puñado de hombres: los filósofos. Los otros les siguen, sea por convicción o de forma automática.
El estado actual del mundo no es prueba de la impotencia de la filosofía, sino prueba del poder de la filosofía. Es filosofía lo que ha llevado a los hombres a este estado – y sólo filosofía conseguirá sacarlos de él.
Para poder vivir, el hombre tiene que actuar; para poder actuar, tiene que tomar decisiones; para tomar decisiones, tiene que definir un código de valores; para definir un código de valores tiene que saber lo que él es y dónde está – o sea, tiene que conocer su propia naturaleza (incluyendo sus medios de conocimiento) y la naturaleza del universo en el que actúa – o sea, necesita metafísica, epistemología, ética, es decir: filosofía.
El hombre no puede escapar de esta necesidad; su única opción es si la filosofía que le guía ha sido escogida por su mente o por el azar.
Los hombres que no están interesados en filosofía son los que más urgentemente la necesitan: son ellos quienes están más desesperadamente en su poder, absorbiendo sus principios de la atmósfera cultural que les rodea – de escuelas, universidades, libros, revistas, periódicos, películas, televisión, etc. ¿Quién determina el tono de una cultura? Un puñado de hombres: los filósofos. Los otros les siguen, sea por convicción o de forma automática.
El estado actual del mundo no es prueba de la impotencia de la filosofía, sino prueba del poder de la filosofía. Es filosofía lo que ha llevado a los hombres a este estado – y sólo filosofía conseguirá sacarlos de él.
Para poder vivir, el hombre tiene que actuar; para poder actuar, tiene que tomar decisiones; para tomar decisiones, tiene que definir un código de valores; para definir un código de valores tiene que saber lo que él es y dónde está – o sea, tiene que conocer su propia naturaleza (incluyendo sus medios de conocimiento) y la naturaleza del universo en el que actúa – o sea, necesita metafísica, epistemología, ética, es decir: filosofía.
El hombre no puede escapar de esta necesidad; su única opción es si la filosofía que le guía ha sido escogida por su mente o por el azar.
Filosofía:
quién la necesita
La filosofía es la ciencia que estudia la naturaleza fundamental de la existencia, del hombre, y de la relación del hombre a la existencia.
Al contrario que las otras ciencias, que estudian solamente aspectos particulares, la filosofía estudia los aspectos del universo que tienen que ver con todo lo que existe.
Al contrario que las otras ciencias, que estudian solamente aspectos particulares, la filosofía estudia los aspectos del universo que tienen que ver con todo lo que existe.
La filosofía no es un lujo, sino una fuerza poderosa de la que nadie puede escapar, tan necesaria como el alimento; una necesidad de la mente, sin la cual el hombre no puede conseguir ni alimento ni ninguna otra cosa que su vida requiera.
Cualquiera puede decir que no tiene una visión de la realidad, del conocimiento, de lo que es bueno; puede decirlo, pero no puede de hecho llevarlo a la práctica. Como ser conceptual, el hombre no puede funcionar en absoluto sin algún tipo de filosofía que le sirva de guía.
Cualquiera puede decir que no tiene una visión de la realidad, del conocimiento, de lo que es bueno; puede decirlo, pero no puede de hecho llevarlo a la práctica. Como ser conceptual, el hombre no puede funcionar en absoluto sin algún tipo de filosofía que le sirva de guía.
El curso de la historia está determinado por ideas filosóficas.
¿Por qué fue la Edad Media una época de miseria y estancamiento humano que duró mil años?
¿Hay algún paralelismo entre la Alemania Nazi y los gobiernos actuales? Lee y sorpréndete.
La historia de hombre ha oscilado entre misticismo y escepticismo, en ciclos que se repiten. ¿En qué punto estamos ahora?
¿Por qué fue la Edad Media una época de miseria y estancamiento humano que duró mil años?
¿Hay algún paralelismo entre la Alemania Nazi y los gobiernos actuales? Lee y sorpréndete.
La historia de hombre ha oscilado entre misticismo y escepticismo, en ciclos que se repiten. ¿En qué punto estamos ahora?
La filosofía influencia aspectos psicológicos y físicos tan personales como la relación sexual
FILOSOFÍA
por Ayn Rand
La brillante disertación de Ayn Rand sobre qué es filosofía, y por qué tú la necesitas.
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